Esta primera editorial es también una puesta en común de las motivaciones, deseos e intenciones que mueven la publicación de esta revista. En un contexto donde la salud está en el centro de la escena, es necesario pensar qué salud queremos construir, quiénes y cómo participan de la producción de estrategias, saberes y debates.

Pensamos la salud como un territorio siempre en disputa, donde resulta necesario abrir espacios de encuentro para armar el mapa de una salud feminista. Por eso, proponemos diálogos con el sistema de salud pero también más allá de él, intentando desdibujar sus fronteras y construyendo puentes, cambiando las divisiones por redes.

Límbica es una invitación a abrir el juego del campo de la salud al intercambio entre discursos que no siempre dialogan entre sí. Porque pensar en una salud feminista es también cuestionar la autoridad epistémica, buscamos potenciar el pensamiento colectivo sobre la salud y las diversas formas de construirla. Una salud que ha sido históricamente apropiada por el orden patriarcal y que hoy, desde la fuerza de los feminismos, reclama su inscripción en el pensamiento y las prácticas de las mujeres y disidencias hacia todes.

Este primer número de Límbica está dedicado a la temática Gestar y Parir, a las diversas formas de hacerlo. Es un número que comenzamos a pensar y a delinear convencidas de que el lanzamiento nos encontraría ya festejando una Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo en Argentina. Sin embargo, seguimos pensando y escribiendo sobre Gestar y Parir atravesades por esa gran deuda de la democracia hacia las personas con capacidad de gestar; y, más aún, en el marco de una pandemia que visibilizó antiguas desigualdades y trajo nuevas vulneraciones. En este contexto, postulamos la maternidad deseada como el escenario irrebatible desde donde pensar prácticas de cuidado en torno al proceso de gestación y de parto.

En esta primera convocatoria buscamos poner el foco en las intervenciones por las que mujeres y disidencias pasan en sus procesos de Gestar y Parir. Revisandolas, visibilizando las múltiples violencias legitimadas que, con la contundencia del acervo popular, hacen que los procesos de gestar y parir “sean un parto” en un sentido doloroso. Es sabido que en momentos instituyentes se necesita de la redundancia en ciertas denominaciones. Si tenemos que hablar de “parto humanizado” es porque hay un campo de prácticas que extravió (o nunca tuvo) dicho carácter, es porque necesitamos, mediante la insistencia de la nominación, ejercer una contrafuerza a prácticas de exclusión y violencia. El primer número está dedicado así a pensar las reproducciones, porque en el Gestar y Parir se entrecruzan procesos de opresion sobre lxs cuerpxs y las subjetividades, donde la mirada feminista llama a generar transformaciones.

Desde Límbica creemos que como trabajadorxs del campo de la salud debemos interpelar nuestras prácticas e intervenciones, pero también nuestros saberes y enunciaciones para construir colectivamente la salud pública que imaginamos.

La invisibilización precedente hoy se vuelve grito urgente.

Comité Editorial